En julio gané un concurso
para diseñar la fachada del Bar “living”. Mi idea fue que el diseño jugara
con la arquitectura. Que tuviera al menos dos lecturas diferentes:
una de día, con las persianas metálicas cerradas (donde se ve el
interior de los animales y la mujer), y otra de noche, cuando el bar
está abierto, y el diseño de las ventanas ya no se ven.
El proceso fue largo comparado a los tiempos que usualmente me lleva pintar un mural. Desde que empecé a diseñarlo hasta que estuvo pronto llevó unos 5 meses (generalmente pintar un muro me lleva 1 o 2 semanas).
Por primera vez también tuve la oportunidad de dedicarme solo a diseñar y a supervisar el proyecto y no a pintarlo, lo cual fue por una parte rarisimo, pero por otra parte fue genial. Podría acostumbrarme rápido a trabajar siempre así!
Va
mi agradecimiento a todos los que lo hicieron posible: a la gente de
Ballantine's, a Publicis Impetu, al Living y a los pintores de
Publicartel que tuvieron que luchar con varias tormentas.
Van fotos del proceso y del diseño final.
Foto del antes.
Y acá una foto de la pintura terminada. Los pintores hicieron un trabajo espectacular. Arriba fue el diseño con un fotomontaje, y abajo una foto de la fachada real.